

Cuando se ingresa a una institución universitaria a estudiar música de manera formal, es común ver dentro del pénsum algunos instrumentos diferentes al principal.
Cuando se tocan instrumentos de viento o cuerda frotada, una materia obligada es tomar cursos de guitarra, teclado o piano, esto para compensar el área armónica carente en algunos de estos instrumentos.
Si se es guitarrista o pianista, lo ideal es aprender a tocar un instrumento melódico, usualmente uno de viento, con ello se busca obtener un complemento, una visión distinta acerca del funcionamiento de las melodías dentro de la música.
Veamos cuál es el objetivo en ambos casos:
La guitarra y el piano son instrumentos de tipo armónico, si bien permiten la ejecución de melodías, su función principal es acompañar, dar un soporte a un instrumento melódico.
Es por ello que dentro del pénsum de una institución formal de música, una de las materias infaltables es piano o teclado complementario, o en algunos casos, para estos instrumentistas es obligatorio tomar cursos de guitarra.

El objetivo principal es aprender acerca de los acordes, el ritmo y la relación de estos con las melodías, se aprende a acompañar de forma correcta.
Siendo guitarrista, el teclado o piano es un instrumento de gran utilidad, este instrumento no maneja tablatura, esto implica que cualquier concepto, acordes o escalas deben aprenderse, no por posición, sino por nota, se deben conocer los diferentes elementos que contienen las estructuras para tocarlos de forma correcta.
Las digitaciones tampoco aparecen en el piano, a diferencia de la guitarra, donde una misma digitación nos permite tocar una escala desde cualquier nota, en el piano cada escala se toca diferente, se deben conocer sus notas.
Para los guitarristas, el piano es un complemento teórico óptimo, obliga a conocer los acordes y escalas por nota, al aplicar esto a la guitarra, será sencillo moverse por el instrumento con libertad.
Adicionalmente que al no manejar la tablatura y encontrarse todo en partitura, resulta de gran utilidad para fortalecer las áreas de lectura musical y ritmo.
¿Qué se busca al aprender un instrumento melódico?

Uno de los problemas comunes de los guitarristas es el fraseo, esto se ve reflejado en la imposibilidad de generar ideas melódicas o motivos dentro de la improvisación.
Esto sucede por una sencilla razón, los guitarristas podemos tocar notas por un espacio prolongado de tiempo de manera ininterrumpida, es lo que en el gremio, de manera burlona, se conoce como el pulmón de acero.
El no estar obligado a realizar pausas al tocar, hace que en muchos casos las frases dentro de la improvisación suenen poco naturales, o en muchos casos es algo que puede afectar la expresividad.
Al aprender un instrumento de viento, lo que se busca es aprender a respirar, a realizar pausas y con ello generar frases, ideas musicales, elementos que pueden usarse en improvisación o incluso en composiciones.
Por naturaleza, los guitarristas no respiramos, nuestro instrumento (musicalmente) no nos obliga a hacerlo, por ello, este tipo de instrumentos, aparte de ser muy divertidos, nos permiten encontrar nuevas ideas y sentir la música de manera diferente.
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¿Por último, cada cuándo se debe tomar una lección?
Lo usual dentro de las universidades es que el instrumento complementario se toma una vez cada quince días, dos semanas por espacio de una hora, en algunos casos, dependiendo del instrumento, puede llegar a ser una vez por semana.
Espero que te animes a complementar tu formación musical aprendiendo otro instrumento, todo lo que aprendemos suma dentro de nuestra formación como músicos.
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